domingo, 26 de diciembre de 2010

El valor de las cosas

La felicidad no está en los años, meses, en las semanas, ni siquiera en los días. Solo se la puede encontrar en los momentos. "Hoy es el mañana de ayer"








Se cuenta que en el siglo pasado, un turista americano fue a la ciudad de El Cairo, en Egipto, con la finalidad de visitar a un famoso sabio.




El turista se sorprendió al ver que el sabio vivía en un cuartito muy simple y lleno de libros. Las únicas piezas de mobiliario eran una cama, una mesa y un banco.



¿Dónde están sus muebles? - preguntó el turista.

Y el sabio, rápidamente, también preguntó: -¿Y donde están los suyos...?

¿Los míos? - se sorprendió el turista. ¡Pero si yo estoy aquí solamente de paso!


Yo también... - concluyó el sabio.
"La vida en la tierra es solamente temporal... Sin embargo algunos viven como si fueran a quedarse aquí eternamente y se olvidan de ser felices."



"El valor de las cosas no está en el tiempo que duran sino en la intensidad con que suceden. Por eso existen momentos inolvidables, cosas inexplicables y personas incomparables."





 
 
 

 
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Imagina










-----------------------------------------------------------------------------------

martes, 2 de noviembre de 2010

No estas deprimido, estas distraido

              Hay momentos en los que nos sentimos de bajón, pero...



                   
-----------------------------------------------------------------------

domingo, 31 de octubre de 2010

El entusiasmo… ¿de dónde se extrae?


En estos tiempos de constantes noticias negativas, cada uno está pasando por desafíos personales y profesionales intensos con mayores o menores dificultades, algunos de nosotros con emprendimientos propios nos encontramos reflexionando y diciendo “hago lo posible para salir adelante, hacer mi aporte, ¿pero de dónde sigo sacando las ganas, parece que casi todo va para atrás?”

De alguna manera, en este pedregoso camino de experiencias personales, imaginamos que encontraremos la respuesta para sostener la energía que nos provee de entusiasmo por diversas partes, buscamos incesantemente y no frenamos hasta que un fracaso o un fuerte dolor nos aparece casi sorpresivamente. Es más o menos de esta forma que aprendemos a percibir y darnos cuenta que no encontraremos la fuerza vital que sostiene nuestra motivación allí afuera; en el mundo exterior.

En ciertas ocasiones se enciende una luz y encontramos una palabra de aliento, una idea inspiradora, un nuevo empuje pero sólo se afianza si esa palabra o idea resuena con “algo” que está dentro de nosotros.

Cabría entonces preguntarnos: ¿Qué clase de potencial yace en nuestro interior que tal vez no estemos utilizando plenamente? ¿Qué ventajas resultarían de su aplicación? ¿Qué clase de impedimentos tengo que me siento tal vez frenado para aplicarlos?
Estas preguntas nos llevan a indagar acerca de nuestro bienestar y del compromiso en la tarea cotidiana. ¿Cuánto de nosotros, que porcentaje del potencial personal, involucramos en el trabajo? ¿20%, 50%, 90%? ¿Conocemos nuestro verdadero potencial? ¿Conocemos cómo aplicar las 4 capacidades más importantes: la capacidad o inteligencia mental, corporal, emocional y la espiritual?

Para renovar nuestras energías, vitalizar los proyectos y emprendimientos se requiere retirar el foco de la atención en el mundo exterior e ir descubriendo la motivación intrínseca: ¿qué aspectos deseo conservar o resguardar que me apasionan en este proyecto? ¿Qué amo hacer? ¿Cómo aplicar mis dones y talentos para el beneficio de un propósito mayor?

La motivación en nosotros – y también en quienes nos acompañan- surge al conectar los propósitos internos y externos, al conectar lo personal con aquello que no necesariamente conocemos pero que va más allá de la individualidad, algo que nos trasciende, que se convertirá en nuestro legado.

Es a partir de estas indagaciones que se brinda el espacio, se logra reconocer el verdadero sentido de nuestros esfuerzos, aquello que nos hace decir: ¡¡¡Si, vale la pena!!!

Es lo que convierte las acciones de seres ordinarios en actos extraordinarios. Si, efectivamente es eso lo que necesitamos, es despertar de verdad a lo que somos y desde allí convertirnos en la fuente de inspiración para los propósitos que llevamos adelante. Seguimos los pasos del poeta Jalil Gibrán que nos dice “El trabajo es amor hecho visible”.

Es en estos momentos de pura Inspiración, sin Escasez y plenos de Abundancia, dónde el sentido del emprendedor se hace trascendente. De este modo la adversidad es una motivación adicional en nuestro camino de realización

Reflexionemos entonces...
                                                                   El entusiasmo

La palabra entusiasmo proviene del Griego y significa tener un Dios dentro de sí.
La persona entusiasta o entusiasmada es aquella que es tomada por uno de los dioses, guiada por su fuerza y sabiduría, y por ese motivo podría transformar la naturaleza que lo rodea y hacer que ocurrieran cosas.

Sólo las personas entusiastas son capaces de vencer los desafíos de lo cotidiano. Es necesario por lo tanto entusiasmarse para resolver los problemas que se presentan y pasar a una nueva situación.
El entusiasmo no es una cualidad que se construye o que se desarrolla. Es un estado de fe, de afirmación de sí mismo.

La persona entusiasta es aquella que cree en su capacidad de transformar las cosas, cree en si misma, cree en los demás, cree en la fuerza que tiene para transformar el mundo y su propia realidad. Está impulsada a actuar en el mundo, a transformarlo, movida por la fuerza y la certeza en sus acciones.
Es necesario creer en uno mismo, en la capacidad de hacer, de transformarse y transformar la realidad que nos rodea.

Dejar de un lado toda la negatividad, dejar de un lado todo el escepticismo, dejar de ser incrédulo y ser entusiasta con la vida, con quienes nos rodean y con uno mismo.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------

domingo, 24 de octubre de 2010

El mundo en tus manos

Había pensado colgar el vídeo y el tema del último trabajo de "La Unión" en el espacio de el blog de Coctelera dedicado a la música,el que llamamos "Melomanía", pero al ver este con el mismo tema me ha gustado más para ponerlo en el espacio dedicado a las "Reflexiones".
Espero que les guste, a mí me ha parecido fantástico este montaje.
¡Que lo disfruten!



Fábula del tonto
El que se hace el tonto conoce perfectamente su sabiduría y también sus limitaciones, además las reconoce públicamente, y no alardea de sus capacidades



Se cuenta que en una ciudad del interior, un grupo de personas se divertían con el tonto del pueblo, un pobre infeliz de poca inteligencia, que vivía haciendo pequeños recados y recibiendo limosnas.



Diariamente, algunos hombres llamaban al tonto al bar donde se reunían y le ofrecían escoger entre dos monedas: una de tamaño grande de 50 centavos y otra de menor tamaño, pero de 1 peso.


Él siempre tomaba la más grande y menos valiosa, lo que era motivo de risas para todos.

Un día, alguien que observaba al grupo divertirse con el inocente hombre, lo llamó aparte y le preguntó si todavía no había percibido que la moneda de mayor tamaño valía menos y éste le respondió:


- Lo sé señor, no soy tan tonto..., vale la mitad, pero el día que escoja la otra, el jueguito se acaba y no voy a ganar más mi moneda.
Esta historia podría concluir aquí, como un simple chiste, pero se pueden sacar varias conclusiones:


La primera: Quien parece tonto, no siempre lo es.
La segunda: ¿Cuáles son los verdaderos tontos de la historia?
La tercera: Una ambición desmedida puede acabar cortando tu fuente de ingresos.
La cuarta: y la conclusión más interesante: Podemos estar bien, aun cuando los otros no tengan una buena opinión sobre nosotros. Por lo tanto, lo que importa no es lo que piensan los demás de nosotros, sino lo que uno piensa de sí mismo.


MORALEJA: El verdadero hombre inteligente es el que aparenta ser tonto delante de un tonto que aparenta ser inteligente...

domingo, 17 de octubre de 2010

Germinar semillas

Un joven soñó que entraba en un supermercado recién inaugurado y, para su sorpresa, descubrió que Jesucristo se encontraba atrás del mostrador.


- ¿Qué vendes aquí? - le preguntó.

- Todo lo que tu corazón desee - respondió Jesucristo.
Sin atreverse a creer lo que estaba oyendo, el joven emocionado se decidió a pedir lo mejor que un ser humano podría desear:

- Quiero tener amor, felicidad, sabiduría, paz de espíritu y ausencia de todo temor - dijo el joven-.

Deseo que en el mundo se acaben las guerras, el terrorismo, el narcotráfico, las injusticias sociales, la corrupción y las violaciones a los derechos humanos.

Cuando el joven terminó de hablar, Jesucristo le dice:

- Amigo, creo que no me has entendido. Aquí no vendemos frutos; solamente vendemos semillas.



"Convierte en frutos las semillas que hay en tí".

jueves, 7 de octubre de 2010


           ¿Dejas huellas?
          
Un hombre que acababa de encontrarse con Jesús Resucitado, iba a toda prisa por el Camino de la Vida, mirando por todas partes y buscando.

Se acerco a un anciano que estaba sentado al borde del camino y le pregunto: "Por favor, señor, ¿ha visto pasar por aquí a algún cristiano?".

El anciano, encogiéndose de hombros le contesto: "Depende del tipo de cristiano que ande buscando".
"Perdone", dijo contrariado el hombre, "pero soy nuevo en esto y no conozco los tipos que hay. Solo conozco a Jesús".



Y el anciano añadió: Pues si, amigo; hay de muchos tipos y maneras.

Los hay para todos los gustos:

"Hay cristianos por cumplimiento, cristianos por tradición, cristianos por costumbres, cristianos por superstición, cristianos por obligación, cristianos por conveniencia, cristianos auténticos..."

"¡Los auténticos! ¡Esos son los que yo busco! ¡Los de verdad!", exclamo el hombre emocionado.
"¡Vaya!", dijo el anciano con voz grave.
"Esos son los mas difíciles de ver. Hace ya mucho tiempo que paso uno de esos por aquí, y precisamente me pregunto lo mismo que usted".
"¿Como podré reconocerle?"

Y el anciano contesto tranquilamente: "No se preocupe amigo. No tendrá dificultad en reconocerle.

Un cristiano de verdad no pasa desapercibido en este mundo de sabios y engreídos.

Lo reconocerá por sus obras. Allí donde van, siempre dejan huellas."



-------------------------------------------------------------------------------------------------------------

domingo, 26 de septiembre de 2010

El pescador satisfecho






Las personas piensan que disfrutar la vida consiste solo en tener mucho dinero y estar acostado mirando el mar. Esa es la imagen de disfrutar la vida



Un rico industrial del Norte se horrorizó cuando vio a un pescador del Sur tranquilamente recostado contra su barca y fumando una pipa.

"¿Por qué no has salido a pescar?", le preguntó el industrial.

"Porque ya he pescado bastante por hoy", respondió el pescador.


"¿Y por qué no pescas más de lo que necesitas?", insistió el industrial.

"¿Y qué iba a hacer con ello?", preguntó a su vez el pescador.

"Ganarías más dinero", fue la respuesta. "De ese modo podrías poner un motor a tu barca. Entonces podrías ir a aguas más profundas y pescar más peces.

Entonces ganarías lo suficiente para comprarte unas redes de nylon, con las que obtendrías más peces y más dinero. Pronto ganarías para tener dos barcas... y hasta una verdadera flota. Entonces serías rico, como yo".

"¿Y qué haría entonces?", preguntó de nuevo el pescador.

"Podrías sentarte y disfrutar de la vida", respondió el industrial.

"¿Y qué crees que estoy haciendo en este preciso momento?", respondió el satisfecho pescador

sábado, 10 de julio de 2010

Cuando un amigo te muerde

Siendo niño pertenecí al Movimiento Scout, ahí nos enseñaban entre otras cosas, la importancia de la “Buena Acción”...

Una buena acción consiste en realizar todos los días actos generosos y nobles, como recoger algún papel en la calle y botarlo en la papelera, ayudar en la casa a lavar platos, cuidar la fauna y la flora, ayudar a alguna persona anciana o impedida a cruzar la calle, etc. me gustaba mucho cumplir esa tarea.
Un día caminaba por una calle de la ciudad y vi a un perro tirado en plena vía sin poder moverse, estaba herido, un carro lo había atropellado y tenía rotas las dos patas traseras, los vehículos le pasaban muy de cerca y mi temor era que lo mataran porque era imposible que él solo pudiera levantarse.

Vi allí una gran oportunidad para hacer la “Buena Acción” y como buen Scout detuve el tráfico, me dispuse a rescatar al perro herido y ponerlo a salvo para entablillarle las patas, yo nunca había entablillado a nadie pero el “Manual Scout” decía cómo hacerlo.

Con mucho amor y entrega me acerqué, lo agarré pero me clavó los dientes en las manos. Inmediatamente me llevaron a la Sanidad y me inyectaron contra la rabia, aunque la rabia por la mordida no se me quitó con la vacuna.
Durante mucho tiempo no entendí por qué el perro me había mordido si yo sólo quería salvarlo y no hacerle daño, no sé que pasó y no me lo pude explicar.

Yo quería ser su amigo, es más, pensaba curarlo, bañarlo, dejarlo para mí y cuidarlo mucho. Esta fue la primera decepción que sufrí por intentar hacer el bien, no lo comprendí, que alguien haga daño al que lo maltrata es tolerable, pero que trate mal a quien lo quiera ayudar no es aceptable.
Pasaron muchos años hasta que vi claramente que el perro no me mordió, quien me mordió fue su herida; ahora si lo entiendo perfectamente, cuando alguien está mal, no tiene paz, está herido del alma y si recibe amor o buen trato ¡muerde!, pero él no hunde sus dientes, es su herida la que los clava.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------

domingo, 4 de julio de 2010

jueves, 17 de junio de 2010

Los niños ven. Los niños hacen

Un amigo nos envía esta reflexión (J.A.L.G.), que nos invita a estar muy atentos...


(Los niños ven. Los niños hacen)
NAPCAN's latest campaign for a Child Friendly Australia.


miércoles, 19 de mayo de 2010

REFLEJO DE LA VIDA

Había una vez un anciano que pasaba los días sentado junto a un pozo a la entrada del pueblo.

Un día, un joven se le acercó y le preguntó:

"Yo nunca he venido por estos lugares, ¿Cómo son los habitantes de esta ciudad?"

El anciano le respondió con otra pregunta: "¿Cómo eran los habitantes de la ciudad de la que vienes?"

"Egoístas y malvados, por eso me he sentido contento de haber salido de allá"
"Así son los habitantes de esta ciudad", le respondió el anciano.


Un poco después, otro joven se acercó al anciano y le hizo la misma pregunta: "Voy llegando a este lugar, ¿Cómo son los habitantes de esta ciudad?"

El anciano, de nuevo, le contestó con la misma pregunta:

"¿Cómo eran los habitantes de la ciudad de donde vienes?"

"Eran buenos, generosos, hospitalarios, honestos, trabajadores. Tenía tantos amigos, que me ha costado mucho separarme de ellos"

"También los habitantes de esta ciudad son así", respondió el anciano.

Un hombre que había llevado a sus animales a tomar agua al pozo y que había escuchado la conversación, en cuanto el joven se alejó le dijo al anciano: "¿Cómo puedes dar dos respuestas completamente diferentes a la misma pregunta hecha por dos personas?"


"Mira" - le respondió - "Cada uno lleva el universo en su corazón. Quién no ha encontrado nada bueno en su pasado, tampoco lo encontrará aquí. En cambio, aquel que tenía amigos en su ciudad, encontrará también aquí amigos leales y fieles. Porque las personas son lo que encuentran en sí mismas, encuentran siempre lo que esperan encontrar".



TODO LO BUENO Y LO BELLO DE LA VIDA QUE

NECESITAS, LO LLEVAS DENTRO DE TI -

¡¡¡SIMPLEMENTE DÉJALO SALIR !!!

lunes, 1 de marzo de 2010

Pedazos de Amistad

El tiempo que pasamos con cada amigo es lo que hace a cada amigo tan importante.







Las amistades se construyen de a pedacitos. Pedacitos de tiempo que vivimos con cada persona.




No importa la cantidad de tiempo que pasamos con cada amigo, sino la calidad del tiempo que vivimos con cada persona. Cinco minutos pueden ser más importante que un día entero.






Así, hay amistades hechas de risas y dolores compartidos; otras de la escuela, otras de salidas, cine y diversión; también están aquéllas que nacen y no sabemos de qué o por qué, pero sabemos que están presentes.





Tal vez éstas estén hechas de silencios compartidos, o de mutua simpatía que no tiene explicación. Hoy también hay muchas amistades hechas sólo de emails, nuestras “amistades virtuales” nos hacen reir, pensar, y reflexionar…

                       


Aprendemos a amar a las personas sin juzgarlas por su apariencia o modo de ser, sin poder etiquetarlas (como a veces hacemos inconcientemente).


Hay amistades profundas que nacen así.

Pienso que el tiempo que pasamos con cada amigo es lo que lo hace tan importante.

Porque el tiempo “perdido” con amigos no existe, sólo es tiempo ganado, aprovechado y vivido.

Son recuerdos para un momento o para toda una vida.


 
Un amigo se torna importante para nosotros y nosotros para él, cuando somos capaces, aún en su ausencia, de reír o llorar, de extrañar o querer estar bien cerca de él sólo para disfrutar de su compañía.





Podemos tener varios mejores amigos de diversas maneras.

Lo importante es saber aprovechar al máximo cada minuto vivido y tener después, en nuestros recuerdos, horas para pasar con ellos, aunque estén lejos.




“TÚ MISMO ERES RESPONSABLE DE LO QUE COSECHAS… … Y APRENDE A COSECHAR LAS COSAS BUENAS…”





“El auténtico amigo es el que lo sabe todo sobre ti y sigue siendo tu amigo.”



domingo, 10 de enero de 2010

"Esa clase de amor..."

Muy temprano, aquella mañana, un anciano llegó a la clínica.
Necesitaba curarse una pequeña herida en la mano...
Mientras el doctor de turno lo atendía, notó que el hombre estaba muy inquieto, como con prisa.


Así que le preguntó que era eso tan urgente que tenía que hacer a esas primeras horas del día.
Para su sorpresa, le dijo que tenía que ir, como todos los días, a la residencia de ancianos para desayunar con su esposa que vivía allí.


Le contó que ella llevaba algún tiempo en ese lugar porque tenía un Alzheimer muy avanzado
El doctor pensó en lo cruel de esta enfermedad, que en forma progresiva hace perder la memoria a quien la padece. El sabía que eso hace sufrir mucho al resto de la familia.


Mientras finalizaba de vendar la herida, le preguntó si ella se alarmaría en caso de que el llegara tarde esa mañana.

No, contestó el hombre, ella no sabe ya quien soy yo.
Hace unos 5 años que no me reconoce.
Entonces, le preguntó el médico extrañado, si ya no sabe quien es usted ¿por qué acude para estar con ella todas las mañanas?
El anciano sonrió. Mientras le daba una palmada en la mano al doctor, le confió:
“Ella no sabe ya quien soy yo, pero yo sé muy bien quien es ella”.
El doctor tuvo que contener las lágrimas mientras salía de su asombro.
Pensó en que esta pareja tenía esa clase de amor que trasciende lo físico e incluso lo romántico.
Esa clase de amor que acepta al otro tal como es. Que lo acepta por lo que ha sido, por lo que será, e incluso por lo que ya nunca podrá ser.

El médico pensó que esa clase de amor es la que hace falta hoy en día. Pensó que esa es la clase de amor con que todos deberíamos ser bendecidos en nuestro hogar.
Hoy en día se vive rápidamente.
La gente ya no quiere subir por la escalera de la vida, pretende hacerlo por un elevador.
Se cambia de automóvil, de casa, de muebles, incluso de ciudad y aún de país.
Por ello los valores fundamentales, como esa clase de amor, son los que nos darán la estabilidad emocional que tanto necesitamos.

LO NEGATIVO: Pensar egoístamente, que en el amor solamente existo yo.
LO POSITIVO: Comprender que “hay esa clase de amor”, que estabiliza nuestras vidas

Buenos momentos...

Piensa antes de hablar

Amor se escribe con P

El Arca de Noe